Todo comenzó minutos después que finalizó el juego con España, a medida que era trasladado al que sería su destino, Paul iba lanzando con la mayor inocencia sus pronósticos de hoy: “La final la gana España. Mañana, los Cardenales deberían darle palo a los Rockies, Carpenter ha estado lanzando bien. 9 y 2, chamo. Ah, ¿viste lo del mundial de softbol? Te dije que las gringas iban a pasear esa vaina, papá. ¿Sigues creyendo que la Nacional gana el juego de estrellas este año? ¿En que mundo vives tú, dónde has estado metido durante los últimos años? ¡Quién tuviera plata para apostarte!” comentó luego de soltar un chorrito de tinta para manifestar su emoción.
Paul continuó su monólogo: “Epa pana, por favor no vuelvan a ponerme delante de ese pocotón de cámaras sin echarme un maquillaje, mira que en ese acuario uno se pone todo pálido, parezco una barriga de tiburón. Qué verguenza, no me eches esa broma, mira que ando por ahí echándole los perros a una pulpa bien rica… es más, te digo, pronostico que de esta semana no pasa, esa pulpa no se me salva, caballe…”.
Paul no pudo terminar la frase, un cuchillo se lo impidió. Jamás pudo predecir que terminaría en una vinagreta. Parece que a los alemanes no les cayó muy bien su último pronóstico, aca el video jajaja.
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